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Termonebulizadores

El ahorro de tiempo gracias a las termonebulizadoras es una gran ventaja frente a los sistemas convencionales de pulverización por pistola.

La mayoría de las gotitas diminutas están suspendidas y se distribuyen en el espacio. Esta niebla se mantiene durante un largo periodo y penetra hasta en las últimas esquinas, rincones y grietas y combate, por tanto, todos los parásitos voladores y no voladores. Gracias a este método activo, el biocida llega directamente al parásito.

Con el método de termonebulización se obtienen unos resultados inmejorables con efecto inmediato (efecto "Knock-Down"). La nebulización de productos con efecto de dispersión aumentan aún más las ventajas de este método. Según el tamaño del espacio, se puede realizar la aplicación con aparatos de gran potencia desde un único punto o, con aparatos más pequeños, desde varios puntos.

Soluciones químicas a base de agua

IGEBA ofrece tubos nebulizadores especiales, si se quiere utilizar agua como vehículo. Mediante este tubo especial de nebulización se mejora considerablemente el espectro de las gotitas en las mezclas a base de agua y, por tanto, las gotitas serán más finas aún. La adición de vehículos especiales como, por ejemplo, el NEBOL, mejora el tamaño de las gotitas y actúa sobre la capacidad de suspensión de las gotitas.

Además, se potencia la visibilidad de la niebla.

Generadores de aerosol UBV (ultra bajo volumen) - Aparatos especiales de calidad profesional

UBV (en inglés ULV-Ultra Low Volume) hace referencia a la cantidad más pequeña de la sustancia activa aplicada/superficie que sea necesaria para eliminar de forma rentable el parásito o el microbio patógeno.

El propósito de este tipo de procedimiento es la máxima reducción del volumen de aplicación para disminuir, así, los costes y el tiempo de trabajo. Mediante los generadores de aerosol UBV IGEBA, la solución química llega a las cabezas pulverizadoras, donde un fuerte chorro de aire de un soplador la divide en gotitas diminutas. Mientras la sustancia corre hacia las cabezas pulverizadoras, pasa por una boquilla dosificadora, para garantizar un rendimiento constante de aplicación y para producir gotitas de tamaño uniforme. Este procedimiento reduce el tiempo de tratamiento y disminuye la cantidad de la sustancia activa aplicada, alcanzando así el máximo grado de eficiencia y una repartición óptima en el espacio y en la superficie de las hojas.